Parece que los adultos lo sabemos todo, sin embargo la realidad nos dice que hay muchas cosas que podemos aprender de los niños. Por ejemplo, mirar las cosas como si las vieras por primera vez, asombrar por la belleza del mar, por la forma de las sombras en el bosque. Creemos que ya lo hemos visto todo y que pocas cosas pueden ya deslumbrarnos, pero hasta las cosas más pequeñas pueden asombrarnos si nos permitimos mirarlas con otros ojos.
Ha sido un placer acompañar a Francisco en su paseo!
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